martes, 31 de diciembre de 2013

Feliz fin de año…


2013, año que pasa para mí sin mayores tropiezos ni mayores logros. Lo sencillo de estos 300 y tantos días que transcurrieron de él es que fue por mucho, parte de la continuación del 2012, que si fue bastante bueno, por todo lo nuevo que tuvo hasta ese entonces para mí.

Uno de los hechos que puedo recalcar es que pasé buena parte del tiempo embebido en mi trabajo, junto a mis alumnos, tratando de dar lo mejor de mí para ellos; me costó, no voy a negarlo, pero al final aprendí mucho en mi faceta como docente. Por otro lado, eso me restó desarrollo en otras facetas, no quiero decir más importantes, pues todas los son para mí, pero que debido a la coyuntura, había dejado de lado, y poco a poco –sin darme  cuenta– mí trabajo me absorbió. Lo que pasa es que yo no tengo la facilidad que tienen muchos (y eso es causa de que se ganen mi admiración) de hacer varias cosas a la vez: yo no funciono así, tengo que dedicarme a una sola cosa, llámenlo desventaja o ventaja, la verdad yo nos sé que sea. De lo que sí puedo estar seguro es que, por lo menos, en mi trabajo, logré la satisfacción esperada; por esa razón, he optado por buscar nuevos rumbos en este año que viene, quiero medirme en otras cosas: para empezar, no tengo intención de conservar el trabajo que he desempeñado de un tiempo a esta parte: la meta que me había trazado en dicho trabajo ya la cumplí. Ahora espero, ya que en este 2013 dejé muy de lado mi actividad literaria, trabajar más en esa área; y quisiera, hoy sí, poder publicar mi libro para este año. Espero lograrlo, lo sabré dentro de 365 días, cuando me toque, escribir de nuevo, un post como este. 

           

2 comentarios:

  1. Hermano...!!! Julio...!!! imaginate brother que vivimos tan cerca, y vos tenes que buscarme por este medio; pareciera que viviéramos en las antípodas del mundo. Error mío, lo sé, pero vos sabes que soy raro.

    Gracias por el comentario camarada. un fuerte abrazo en "la distancia".

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