Retomo mi blog después de un año de ausencia. Un año de
silencio que me ha servido para valorar esta herramienta como lo que es: un
motivo para mantener la mano caliente y escribir, aunque sea por inercia.
Por mucho tiempo pensé en si valía la pena mantener el blog,
pensé en cerrarlo definitivamente; ahora, puedo verlo con más claridad, porque
en verdad necesito de esta tabla de salvación que es la rutina auto impuesta de publicar por lo menos un post a la semana: la
rutina a veces puede salvarnos la vida.
En lo personal, durante este año, he experimentado
varias cosas. He dejado temporalmente la
literatura, y me he dedicado a otras actividades que me han llenado por igual;
aunque siempre está ELLA, ahí, agazapada, sin reprocharme, como aquella novia incondicional que no me pide nada, y sin embargo me ha dado todo. La amo: como no amar a la literatura, que
incontablemente me ha salvado la vida.
ResponderEliminarBienvenido de nuevo amigo mío.
Quien tiene un blog,tiene un tesoro virtual.
Un abrazo.
MA.
El blog de MA.
MA:
ResponderEliminar“Quién tiene un blog tiene un tesoro virtual” buena frase MA, nunca se me habría ocurrido, parafraseándola también sería un equivalente a: “Quien tiene un blog tiene una reliquia virtual”; y es que cualquiera puede sacarse una selfie, escribir cualquier estado, retuitiar cualquier cosa baladí, o subir a instagram cualquier foto insulsa, pero escribir un post, y mantener un blog enfocado en un tema específico no es cosa de todo el mundo.
Un abrazo querida amiga, gracias por comentar y por mantenerte fiel con la poesía.